La reducción de los niveles altos de azúcar en la sangre es una de las principales condiciones para la terapia y prevención de la diabetes, la obesidad y el cáncer. Esto se puede lograr no solo con medicamentos, sino también con alimentos.
Aguacate. Es un alimento con un índice glucémico bajo y se considera uno de los mejores protectores contra el desarrollo del síndrome metabólico. Las grasas del aguacate, que incluyen ácidos grasos poliinsaturados y monoinsaturados, aumentan la sensación de saciedad durante las comidas, mejoran la sensibilidad del organismo a la insulina y reducen la inflamación.
Ajo. No contiene carbohidratos que aumenten la concentración de glucosa en el organismo. Su consumo en ayunas tiene un efecto reductor del azúcar en la sangre. La cebolla tiene un impacto similar, probablemente debido a la acción de la alicina, una sustancia presente en estos vegetales.
Cereza. Con un índice glucémico bajo, contiene antocianinas, compuestos conocidos por su capacidad para prevenir el desarrollo de la diabetes y la obesidad.
Verduras de hoja verde. Las ensaladas verdes, la espinaca, la col rizada, la acelga y las hojas de nabo son ricas en fibra y nutrientes. Dos de ellos, el magnesio y la vitamina A, son considerados por los científicos como algunos de los mejores nutrientes para reducir los niveles de azúcar en la sangre.
Granos integrales. Son una de las mejores fuentes de carbohidratos para diabéticos. Se digieren lentamente y ayudan a mantener niveles estables de azúcar en la sangre sin picos. Algunos de los más recomendados son la avena integral, la cebada perlada y la quinoa.
Huevos. Cargados de proteínas, tienen un índice glucémico de cero. Según los científicos, «para las personas con diabetes o prediabetes, los huevos son un alimento increíblemente saludable».
Café. Si se consume sin azúcar ni crema, puede ayudar a reducir el nivel de azúcar en la sangre. Algunos estudios sugieren que el consumo regular de café puede disminuir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en más de un 10%.
Almendras. Muchos tipos de frutos secos tienen un índice glucémico bajo y no provocan fluctuaciones en los niveles de glucosa. Las almendras se destacan como uno de los mejores alimentos para apoyar los mecanismos de regulación del azúcar en el organismo. Se ha descubierto que su consumo ayuda a limitar los picos de glucosa después de las comidas.
Canela: mejora la sensibilidad a la insulina.
